La colocación de piercing oral es hoy en día muy frecuente en la población por una cuestión de moda. Las complicaciones que puede ocasionar esta práctica son numerosas y cada vez más frecuentes debido principalmente a que se lleva a cabo por personal no sanitario, el cual carece de conocimientos médicos y anatómicos, y a que el portador del piercing no es informado adecuadamente sobre las complicaciones y los posibles riesgos que puede acarrear esta práctica en la salud oral.
¿Qué son los piercing bucales cosméticos?
Los piercing bucales cosméticos son perforaciones en la lengua, los labios o las mejillas. Desde hace algunos años, se han convertido en una forma de auto expresión. Al igual que para las orejas, la joyería de metal utilizada en las perforaciones bucales cosméticas tiene diferentes estilos y formas (aretes, barras y argollas….). Sin embargo, perforarse la lengua, los labios o las mejillas implica mayores riesgos para la salud que perforarse las orejas. Antes de perforarse cualquier parte de la boca, debe consultar al odontólogo.

¿Cuáles son los distintos riesgos involucrados en las perforaciones bucales cosméticas?
Quizá desconozca los potenciales efectos colaterales de las perforaciones bucales cosméticas.
Estas pueden ser:
- Infección:La boca contiene millones de bacterias que pueden producir una infección a partir de la perforación bucal cosmética. El manejo de la joyería una vez colocada en la boca también aumenta las probabilidades de padecer una infección.
- Hemorragia prolongada:Si la aguja atraviesa un vaso sanguíneo durante la perforación, puede producir una hemorragia difícil de controlar y una pérdida sangre.
- Dolor e inflamación:Son síntomas comunes de las perforaciones bucales cosméticas. En casos extremos, la lengua gravemente inflamada puede bloquear la vía respiratoria y restringir la respiración.
- Dientes astillados o rotos:El contacto con la joyería bucal puede fracturar los dientes. Y en caso de restauraciones, como coronas o fundas, también pueden resultar dañados si se golpean con la joyería.
- Daño a las encías:La joyería de metal no sólo puede dañar el tejido gingival, además, puede hacer que las encías se retraigan. Aparte de ser antiestéticas, las encías retraídas hacen que la raíz del diente sea más vulnerable a las caries y a la enfermedad periodontal.
- Interferencia con la función bucal normal:La joyería bucal puede originar un flujo excesivo de saliva, dificultar la correcta pronunciación de palabras, y causar problemas con la masticación y la deglución.
- Enfermedades transmitidas por la sangre:Las perforaciones bucales cosméticas han sido identificadas por el Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos (National Institutes of Health) como posibles factores de transmisión de la hepatitis B, C, D y G.
- Endocarditis:Las perforaciones bucales cosméticas conllevan riesgos de endocarditis (inflamación de las válvulas o de los tejidos cardíacos). La herida creada durante la perforación bucal le da a las bacterias bucales la oportunidad de ingresar al torrente sanguíneo, desde el cual pueden llegar al corazón.
- Hipersensibilidad a los metales:También es posible que se den reacciones alérgicas en la zona perforada.
- Daño en los nervios: Después de una perforación, puede experimentar un entumecimiento de la lengua como consecuencia del daño en un nervio que suele ser temporal, pero a veces puede ser permanente. El nervio lesionado puede afectar al sentido del gusto, o a la forma de mover la boca. Los daños en los vasos sanguíneos de la lengua pueden causar una grave pérdida de sangre.
- Problemas en las citas con el dentista:La joyería podría interferir en el cuidado dental al bloquear las radiografías.

Otras complicaciones menos frecuentes son, por ejemplo;
- La malposición dentaria, que se explica por un desequilibrio de las fuerzas musculares de la lengua frente al orbicular de los labios y el anillo del buccinador.
- La presencia de un artefacto metálico en la boca puede estimular la producción de saliva y afectar a la comunicación, pues interfiere con la capacidad de pronunciar palabras claramente, como las que incluyen las consonantes L, T, R y S.
- Se ha especulado que la corriente galvanica de los aretes de acero inoxidable, en contacto con otros metales intraorales, como las amalgamas de plata, puede causar hipersensibilidad pulpar.
- Además, la herida causada por la colocación del piercing puede evolucionar (tras varios meses) con el recubrimiento epitelial del mismo, lo que supone una complicación en el momento de retirarlo.
- La perforación de los tejidos blandos puede cicatrizar de forma hiperplásica.
- Pueden producirse además desgarros, sobre todo en los frenillos, dificultad en la percepción de sabores, aspiración e ingestión del piercing colocado.¿Cuánto dura una perforación bucal cosmética?
Siempre que no padezca infecciones en la boca y que las perforaciones bucales cosméticas no interfieran con el funcionamiento normal de la misma, pueden permanecer en la boca indefinidamente. No deje de acudir al dentista al primer signo de dolor o problemas, además de realizar exámenes periódicos. Debido a los riesgos que implican, inclusive después de haber cicatrizado la herida inicial, como el daño a los dientes o tragarse la joyería suelta, lo más seguro es evitar las perforaciones bucales cosméticas.
Si ya tiene piercings:
- Póngase en contacto con el dentista o médico inmediatamente si tiene algún síntoma de infección: hinchazón, dolor, fiebre, escalofríos, temblores o vetas rojas alrededor de la zona del piercing.
- Mantenga la zona limpia y libre de cualquier materia que pudiera acumularse en la joya; para ello, utilice un enjuague bucal tras cada comida.
- Intente evitar chasquear la joya contra los dientes y evite tensionar el piercing. Sea cuidadoso y tenga en cuenta el movimiento de la joya al hablar y masticar.
- Compruebe el ajuste de la joya periódicamente (con las manos limpias). Esto puede ayudar a evitar que se la trague o se asfixie con ella.
- Si practica algún deporte, extraiga la joya y proteja la boca con un protector bucal.
- Vea al dentista con regularidad, y no olvide cepillarse dos veces al día y usar seda dental a diario.
Por supuesto, la mejor opción es pensar en quitarse las joyas de la boca antes de que causen un problema. No se perfore por capricho. El piercing será una responsabilidad añadida a su vida, ya que requiere atención constante y mantenimiento. Hable con su dentista para obtener más información.



